Hacia rutas salvajes

. Sinopsis:


Basada en el bestseller de Jon Kracauer, basado en hechos reales. Narra las aventuras de Christopher McCandles, un joven de 24 años que tras graduarse en la Universidad Emory de Atlanta y donar a Oxfam los 24000 dólares que tenía para estudiar derecho, decidió renunciar a todas las comodidades de la vida moderna y emprender un viaje que lo llevaría al monte McKinley, en Alaska.


. Crítica:

Tras 5 años sin haber dirigió una sola película, Sean Penn, volvía a saltar detrás de las cámaras para llevar a cabo la adaptación del gran libro de Jon Kracauer. Consiguiendo con ella su mayor éxito como director.

La película se estrenó en el año 2007 y recuerdo como me devore el libro en apenas dos días y el mismo viernes del estreno acudí a verla, tengo grabada todavía la emoción de ir al cine a ver aquella historia que tanto me había fascinado.
Centrándonos en la película, creo que es una de las grandes adaptaciones de una novela al cine, en la que en las casi dos horas y medía de película, Penn consigue plasmar la idea y la esencia del libro, gracias en parte al gran trabajo de fotografía a cargo de Eric Gautier, que consigue plasmar la belleza de la naturaleza salvaje y a su vez el terror que esta provoca.

En cuanto a las interpretaciones, es una película para el lucimiento de Emile Hirsch, donde el joven actor supera con creces la prueba, sobretodo en el aspecto físico, consiguiendo trasmitir todas las sensaciones y sentimientos que el personaje requería. En algunos momentos de la película esta acompañado por Hal Holbrook, al cual le sirvió esta interpretación para conseguir una nominación en los Oscars de 2007.

La banda sonora corre a cargo del lider de Pearl Jam, la cual pienso que se integra a la perfección dentro de la película.

En resumen, para mi, es la road-movie por excelencia y una de mis películas favoritas, donde en algunos momentos alcanza lo sublime.

Aquí dejo el trailer por si alguien esta interesado:

Hoy me quiero despedir con una frase de la película:

Bueno, no sé gran cosa del mar pero si sé que aquí es así. Y también sé lo importante que es en la vida no necesariamente ser fuerte sino sentirte fuerte, medir tu capacidad al menos una vez, hallarte al menos una vez en el estado más primitivo del ser humano, enfrentarte solo a la piedra ciega y sorda sin nada que te ayude, salvo las manos y la cabeza.

Palomitometro: 9 palomitas